martes, 4 de septiembre de 2007

Plato único


Tres huevos para los reyes elfos bajo el cielo
Siete rodajas de puerro para los señores enanos en casas de piedra
Nueve cucharadas de calabacin y zanahoria ralladas para los hombes mortales condenados a morir
Ciento cincuenta gramos de bacon para el señor oscuro, todo rehogado en la sarten oscura, en la cocina de Mordor donde se extienden las llamas


Un bol para batirlos a todos, los huevos, con medio vaso de leche
Un bol para extender el hojaldre, cubierto de margarina
Un bol para juntarlos a todos
Y cocinarlos en las tinieblas, en el horno de Mordor,
a doscientos grados durante cuarenta y cinco minutos
donde se extienden las sombras